Open Sea gana la 300 Millas a 3 de Moraira Trofeo Grefusa y Plis Play bate el record de la regata
Open Sea, tripulado por Dominique Luna, Toni Puig y Luis Mata, se proclamó vencedor de la Regata 300 Millas a 3 de Moraira Trofeo Grefusa más rápida de su historia, que se caracterizó por un impresionante temporal. Plis Play, del alicantino Vicente García batía el record de velocidad de la prueba, y embarcaciones como Eurotec Hydra daban el do de pecho al realizar una espectacular remontada de 30 millas en pocas horas, tras sufrir una rotura de más de 2 metros en al vela Mayor.
La 30 Millas a 3 Trofeo Grefusa del Club Náutico de Moraira tocaron a su fin a lo largo del pasado viernes 26, después de inestabilidades, roles de viento y un fuerte temporal, el primero del invierno 2006-2007, que no dejó títere con cabeza, y convirtió la prueba en uno de los infiernos más agradables para los regatistas de Altura con tripulaciones reducidas.
Eurotec Hydra no pudo revalidar la clasificación del año pasado, pero la satisfacción de la tripulación resultaba evidente después de enfrentarse a una prueba de un gran nivel, que tuvo temporal de frío y viento, granizo, lluvia, y ‘parones’ desesperantes, y donde la tripulación supo enfrentarse a roturas importantes que fueron capaces de solventar antes de afrontar lo más fuerte del temporal, en el que alcanzaron planeadas de 13 nudos, rumbo a la línea de meta en el puerto de Moraira.
Crónica de la regata
La Regata 300 Millas a 3 de Moraira con una participación de casi 30 barcos, entre los que se encontraban los grandes especialistas en Regatas de Altura con tripulaciones reducidas, entre ellos el Eurotec Hydra de Tono Sánchez, un GS Regata 40 tripulado por Tono Sánchez, Mariano Tur y Víctor Lucas, soltaba amarras el miércoles 24 de enero.
La salida estaba prevista a las doce del Mediodía, pero el Comité, con Marino Gil como Oficial principal, tuvo que retrasar el procedimiento a la espera de que se estabilizara el viento, que rolaba entre noroeste y norte, con una intensidad de 8 nudos.
En estas condiciones, la mayor parte de la flota se agrupó junto al Comité, mientras unidades como Eurotec-Hydra, de Tono Sánchez buscaba vientos limpios por el lado de baliza para no verse acorralado por la potencia de unidades más grandes, que enseguida intentaron tomar el mando de la prueba.
Con viento de nor oeste- norte, el Comité daba la salida pasadas las 12:15 del mediodía. La flota se dirigió completamente agrupada hacia la baliza de desmarque situada a menos de una milla, por donde pasaban primero Bye Luby, Sport Nautic y Marina Greenwich. Desde allí los participantes arrumbaron hacia Isla Grosa, situada en Murcia.
Primera decisión importante: Por costa o por mar
Las opciones tácticas fueron fundamentales en esta regata. La primera decisión fue la de elegir bordo: costear rumbo a Murcia con un viento rolón y escaso, o buscar viento libre mar adentro, para luego bajar hacia Isla Grosa.
Eurotec- Hydra, consciente de la complejidad de una regata tan larga como la 300 Millas de Moraira, optaba pronto por separarse de la línea de costa, buscando vientos limpios. Fue una opción que siguieron también unidades como Brujo, Grefusa, Papaya, Thartún o Reti, ya que el viento presentó varios roles, y si bien pareció que estas unidades se retrasaban en su recorrido, en relación con las que habían tomado el bordo de tierra: Plys Play, Bye Lyby, Open Sea, Casas del Mediterráneo o Kyrie, poco después los primeros, una vez tomada la medida al viento comenzaron a bajar buscando el paso por baliza.
Pero el viento se mofó de los regatistas. Los que decidieron costear encontraron grandes dificultades para avanzar, mientras que los que habían tomado el bordo de mar- Eurotec entre ellos- corrían veloces. Sin embargo, a media que unos y otros se acercaban a Isla Grosa, los participantes más cercanos a tierra vieron como subía el viento, mientras los que llegaban del mar se vieron inmersos en una trampa de difícil solución, porque el viento libre que los había acompañado hasta entonces se vino abajo progresivamente y los frenó sin poder hacer gran cosa mientras sus oponentes avanzaba veloces.
Open Sea, tripulado por Dominique Luna, Toni Puig y Luis Mata, se proclamó vencedor de la Regata 300 Millas a 3 de Moraira Trofeo Grefusa más rápida de su historia, que se caracterizó por un impresionante temporal. Plis Play, del alicantino Vicente García batía el record de velocidad de la prueba, y embarcaciones como Eurotec Hydra daban el do de pecho al realizar una espectacular remontada de 30 millas en pocas horas, tras sufrir una rotura de más de 2 metros en al vela Mayor.
La 30 Millas a 3 Trofeo Grefusa del Club Náutico de Moraira tocaron a su fin a lo largo del pasado viernes 26, después de inestabilidades, roles de viento y un fuerte temporal, el primero del invierno 2006-2007, que no dejó títere con cabeza, y convirtió la prueba en uno de los infiernos más agradables para los regatistas de Altura con tripulaciones reducidas.
Eurotec Hydra no pudo revalidar la clasificación del año pasado, pero la satisfacción de la tripulación resultaba evidente después de enfrentarse a una prueba de un gran nivel, que tuvo temporal de frío y viento, granizo, lluvia, y ‘parones’ desesperantes, y donde la tripulación supo enfrentarse a roturas importantes que fueron capaces de solventar antes de afrontar lo más fuerte del temporal, en el que alcanzaron planeadas de 13 nudos, rumbo a la línea de meta en el puerto de Moraira.
Crónica de la regata
La Regata 300 Millas a 3 de Moraira con una participación de casi 30 barcos, entre los que se encontraban los grandes especialistas en Regatas de Altura con tripulaciones reducidas, entre ellos el Eurotec Hydra de Tono Sánchez, un GS Regata 40 tripulado por Tono Sánchez, Mariano Tur y Víctor Lucas, soltaba amarras el miércoles 24 de enero.
La salida estaba prevista a las doce del Mediodía, pero el Comité, con Marino Gil como Oficial principal, tuvo que retrasar el procedimiento a la espera de que se estabilizara el viento, que rolaba entre noroeste y norte, con una intensidad de 8 nudos.
En estas condiciones, la mayor parte de la flota se agrupó junto al Comité, mientras unidades como Eurotec-Hydra, de Tono Sánchez buscaba vientos limpios por el lado de baliza para no verse acorralado por la potencia de unidades más grandes, que enseguida intentaron tomar el mando de la prueba.
Con viento de nor oeste- norte, el Comité daba la salida pasadas las 12:15 del mediodía. La flota se dirigió completamente agrupada hacia la baliza de desmarque situada a menos de una milla, por donde pasaban primero Bye Luby, Sport Nautic y Marina Greenwich. Desde allí los participantes arrumbaron hacia Isla Grosa, situada en Murcia.
Primera decisión importante: Por costa o por mar
Las opciones tácticas fueron fundamentales en esta regata. La primera decisión fue la de elegir bordo: costear rumbo a Murcia con un viento rolón y escaso, o buscar viento libre mar adentro, para luego bajar hacia Isla Grosa.
Eurotec- Hydra, consciente de la complejidad de una regata tan larga como la 300 Millas de Moraira, optaba pronto por separarse de la línea de costa, buscando vientos limpios. Fue una opción que siguieron también unidades como Brujo, Grefusa, Papaya, Thartún o Reti, ya que el viento presentó varios roles, y si bien pareció que estas unidades se retrasaban en su recorrido, en relación con las que habían tomado el bordo de tierra: Plys Play, Bye Lyby, Open Sea, Casas del Mediterráneo o Kyrie, poco después los primeros, una vez tomada la medida al viento comenzaron a bajar buscando el paso por baliza.
Pero el viento se mofó de los regatistas. Los que decidieron costear encontraron grandes dificultades para avanzar, mientras que los que habían tomado el bordo de mar- Eurotec entre ellos- corrían veloces. Sin embargo, a media que unos y otros se acercaban a Isla Grosa, los participantes más cercanos a tierra vieron como subía el viento, mientras los que llegaban del mar se vieron inmersos en una trampa de difícil solución, porque el viento libre que los había acompañado hasta entonces se vino abajo progresivamente y los frenó sin poder hacer gran cosa mientras sus oponentes avanzaba veloces.
Paso por Isla Grosa en Murcia
De esta forma, la flota que se había dividido en dos grandes grupos volvía a unirse al paso por el control de Isla Grosa. La clasificación compensada realizada con los tiempos de Paso de Isla Grosa situaba a la cabecera de la prueba a KS del mallorquín Matias Gil, al deniense Open Sea, de Dominique Luna, y al valenciano Brujo de Alberto de Castro.
Eurotec Hydra, que se había distanciado de la costa más que sus compañeros, pagó caro el bordo de mar que se volvió en su contra y que lo obligó, a partir de entonces, a navegar a la desesperada para recortar los tiempos y las distancias de esta primera baliza.
Desde Isla Grosa los participantes pudieron rumbo a Formentera. Las unidades más grandes, Plis Play, de Vicente García y Bye Lubye, de Miguel Sánchez, se enzarzaron en un mano a mano por dominar la cabecera de la flota. Pero tras ellos, muy seguros navegaban participantes como Open Sea, Brujo, Casas del Mediterráneo, Tanit y Marina Greenwich. La flota se fue estirando y se fueron formando grupos. Eurote Hydra forzaba la máquina e intentaba recortar posiciones.
Fue un tramo duro, sobre todo para el Eurotec que rompió la Mayor con una raja de más de 2 metros. La Tripulación formada por Tono Sánchez, Victor Lucas y Mariano Tur, tuvieron que aproar el barco, bajar la mayor e intentar una reparación de Urgencia. Mientras la flota bordeaba Formentera e Ibiza.
Los vientos locales de las Baleares
Las Baleares se convirtieron en una trampa para muchos de los participantes. Si hasta entonces habían navegado bien, la influencia de las islas, y de los vientos locales produjeron encalmadas y parones de más de 3 horas.
La previsión meteorológica se anunciaba nefasta. A medida que pasaran las horas, decía el parte, el temporal se intensificaría y se centraría en pleno temporal en la zona de Baleares, entre las islas y el puerto de Moraira.
Después de una reparación de urgencia con cinta adhesiva, Eurotec se vio inmerso en la influencia de las islas. Navegaban bien, buscando el mejor paso cuando el viento se vino abajo.
Sabían que la cosa apuntaba a vientos fuertes, pero en situaciones como esta, lo más urgente era escapar de la encalmada y buscar viento, navegar con la mayor velocidad, ya que eran conscientes de que las distancias se habían ido multiplicando hasta superar con creces las 30.
Las unidades más grandes, Plis Play y Bye Luby habían bordeado ya las islas Baleares, y con gran esfuerzo comenzaban a afrontar el último tramo de la regata. Para su pesar, no habían conseguido distanciarse lo suficiente de la flota como para compensar tiempo, y el pique entre ambas unidades era increíble.
Tras ellos, imparables, Open sea, Brujo, Casas del Mediterráneo, Marina Greenwich, Kyrie, KS, la flota también avanzaba para salir de nuevo a alta mar.
Segunda elección: Moraira por arriba o con rumbo directo
Y aquí llegó la segunda elección más importante de bordo de la regata. Unidades como Plis Play optaron por subir hacia el norte para luego bajar con fuerza; otras como Bye Luby pusieron rumbo directo por la parte de abajo.
Planeadas de 13 nudos
Mientras, poco a poco los del Eurotec fueron saliendo del agujero de viento, como antes lo habían hecho las otras unidades. Nos se atrevieron a poner rizos a la mayor, aun sabiendo que el parte podía complicarse, y en estas condiciones, se metieron de lleno en la borrasca con lluvia, frío, viento, granizo, y en noche cerrada. Con 20 nudos de viento, la mayor volvió a dar problemas, y tuvieron que volver a bajarla para reparar, y después, el viento fue subiendo en intensidad… hasta sobrepasar los 40 nudos y el Eurotec comenzó a responder como nunca lo había hecho, con planeadas de 13 nudos.
Plis Play, record de la regata
El primer barco en llegar a Meta fue el Plis play de Vicente García, que llegaba a las 4:11 minutos de la madrugada del viernes. Había invertido 40 horas y 55 segundos y había batido el record de velocidad de la prueba. Apenas cuatro minutos después llegaba Bye Lubye, de Miguel Sánchez. Open Sea, de Dominique Luna era tercero en real, llegaba ocho minutos después de las 6 de la mañana del viernes, con casi 42 horas de navegación, y conseguía proclamarse campeón de la regata.
Eurotec Hydra, que había llegado a estar a más de 30 millas de sus competidores, entraba en puerto en torno a las 12:30 del mediodía del viernes, había necesitado 48 horas y 22 minutos, pero el esfuerzo había valido la pena. Tras los parones, las averías, las reparaciones, había logrado remontar distancia y tiempo de forma espectacular.
La última unidad en llegar a puerto fue Nautic Islas de Guillermo Puchol, casi a las 5;30 de la tarde, después de más de 53 horas de regata.
Tono Sánchez: “ha merecido la pena”
Tono Sánchez “Ha sido una regata impresionante y nos sentimos orgullosos. Había 30 participantes y solo 19 hemos acabado la prueba. Hemos conseguido un puesto discreto, pero en estos momentos lo que más nos importa ha sido saber que podíamos superarnos, vencer las dificultades, el recuerdo de la emoción que hemos compartido con las planeadas que realizábamos…”. “Hubo un momento, cuando vimos que no habíamos acertado la opción táctica del primer tramo, cuando rompimos la vela y sabíamos que estábamos muy lejos de la cabecera de la flota… que era difícil no desanimarse, no tirar la toalla, pero los tres nos miramos y nos planteamos que el primer reto que nos habíamos marcado era demostrar que podíamos hacerlo, que teníamos que llegar hasta el final… y luego ha sido realmente bonito, ha sido espectacular. Ha merecido la pena”.
La 300 Millas a 3 de Moraira Trofeo Grefusa se ha podido seguir en directo a través de Regatacontrol, en Internet.
Clasificaciones:
1.- Open Sea – Dominique Luna- RCN Denia
2.- Marina Greenwich – Ramón Juneman – CN Campomanes
3.- KS – Matías Gil – RCN Palma
4.- Reti – Xavier Santamaría – MRCY Bayona
5.- El Brujo – José Carlos de Francisco – RCN Calpe
……..
16.- Eurote-Hydra – Tono Sánchez – RCN Castellón
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